Conversamos con Felipe Henríquez Oyarce, presidente de la Cooperativa de Turismo ALTUS, para conocer su experiencia emprendiendo, cómo ha afectado el tema del Covid-19 a la operación turística y cómo los fondos públicos/privados han jugado un rol dentro de todo este escenario.
Ustedes tienen un emprendimiento relacionado con el turismo, ¿cómo surge esta idea, este emprendimiento?
Tenemos un emprendimiento, se trata de un tour operador, enfocado en el altiplano de la Región de Tarapacá. Desarrollamos nuestras actividades principalmente en la comuna de Colchane, y además tenemos líneas de turismo aventura, registradas en Sernatur, de trekking, éstas las realizamos tanto en el sector altiplánico como en distintos sectores de la región de Tarapacá abarcando las siete comunas de nuestra región.
Toda esta idea nace a raíz de mi propia experiencia de viajes, subiendo fotos en las redes sociales, y resultó que muchos amigos o conocidos me preguntaban por los precios o los lugares donde estaba, si estaba en San Pedro, pero yo les comentaba que no era San Pedro, que esos paisajes tan hermosos quedan a tan sólo 3 horas desde Iquique. Como me preguntaban el costo de llevarlos vi esto como una oportunidad de negocios, llevando amigos en un comienzo y poco a poco comencé a informarme sobre el tema, de que existía una institución que regulaba el mismo, conocí a Sernatur, el servicio nacional de turismo, me di cuenta de que necesitaba estar registrado y cumplir una serie de requisitos por lo que empecé a “darle” en ese sentido; capacitarme, estudiar, formalizar la empresa y de a poco se fue desarrollando esta iniciativa.
Y ¿qué retos y dificultades han tenido que enfrentar?
El primer reto que enfrentamos fue la falta de información, dado que nadie sabe que estás iniciando este tipo de negocios por lo que nadie se acerca y te dice “oye, tienes que hacer esto…” entonces si uno no busca y rebusca se va a enfrentar a partes por estar ilegal, etc. Uno no sabe la regulación del mercado, los precios y esas cosas por lo que es un tema complicado en un principio. Entonces una vez que me di cuenta de que existían gremios y organizaciones de turismo me acerqué a ellos, aunque una de las dificultades es la poca comunicación de los gremios, por decirlo así, también la poca solidaridad con la gente nueva, lo que limita mucho el desarrollo de las nuevas organizaciones o empresas. En base a esto es que nace la Cooperativa de Turismo y la Mesa Regional de Tour Operadores, de la cual llegué a ser presidente. Todo con el fin de eliminar esas brechas para la gente nueva e invitarlos a participar desde un comienzo.
¿Cómo ha afectado a su entorno, a la comunidad de la localidad, toda esta incursión dentro del turismo?
Es un tema complicado; la comunidad local ha generado “anticuerpos” respecto a los tour operadores, ya sea por desconocimiento, o bien gente mal intencionada, por problemas personales. Pero no se analiza la situación económica, que es lo que debería primar en este tipo de emprendimiento, más allá de determinar si la persona te “cae bien” o no, es analizar la parte económica que está dejando esta empresa en el territorio, los ingresos que deja, cómo contribuye al desarrollo de la misma, etc. Así que de cierta manera esto tiene sus pros y sus contras para quien comienza a emprender, pero la comunidad local, cuando se comienza a articularse bien y existen una buena comunicación ambos pueden desarrollarse. Uno comienza a llevar a más gente, más turistas, ellos comienzan a tener más ingresos, por lo que ellos mismos deciden invertir. Cuando partimos haciendo el tour al Parque Nacional Volcán Isluga, la señora Flora, de Enquelga, inició recibiéndonos en su casa dando almuerzo y desayuno en un espacio bastante reducido en donde no había un espacio mayor que para 7 personas, luego ya con una mayor capacidad de carga llevábamos a 20 turistas, ya utilizando un furgón, por lo que ella amplió su comedor, mejoró sus precios y sus servicios, se capacitó y se formalizó. Lo mismo en Puchuldiza, Don Eliodoro se formalizó, también pudimos instalar una entrada informativa para el turista, la cual era muy necesaria, él pudo también sacar boleta. Igualmente se capacitó tanto en temas de guiado turístico como en temas gastronómicos, y de esta manera se va enriqueciendo la cadena de valor, la cadena comercial.
¿Cómo los ha afectado todo el tema de la pandemia y los confinamientos?
Bueno, es un tema que aún nos afecta, el tema de la pandemia; estamos hoy en día sin una estrategia clara por parte del gobierno, porque, aunque los privados tengamos muchas ganas, mucha iniciativa de sacar adelante este tema, de la mano con el plan “paso a paso”, es bastante complejo porque esto se debe articular con el ente público, dado que si no se articula una estrategia con el ente público esto no va a funcionar, y es lo que ha venido pasando. Es como, “ya, fase uno: todos para la casa, fase 2: operen”, pero no hay una estrategia de salir al mercado en fase 2 con claridad y reservas, entonces eso al final dificulta toda la parte comercial y creo que eso lo seguiremos enfrentando, pero esperamos que nos “sentemos a conversar”, esperemos que esta renovación de políticos que se viene ahora con las elecciones ayude un poco a cambiar la mentalidad de los políticos que están actualmente, ya que no consideran el generar una estrategia clara de desarrollo turístico, no lo hicieron antes de la pandemia y ahora con la situación actual tampoco lo están haciendo, por lo que simplemente nos encontramos “a la deriva” de quién sabe cuándo pase todo esto.
¿Qué tipo de apoyos y ayudas externas han podido implementar?
Bueno, hemos podido participar en varios fondos, tanto públicos como privados, inversiones dentro del equipo de trabajo, etc. Claro, éstas son ayudas que se agradecen, que no están de más, pero como no existe una estrategia clara para el turismo dentro de la situación de pandemia, esto no genera un gran impacto en la empresa, al final uno se llena de activos y de planes de marketing digitales que no están alineados con el plan paso a paso, no existe un plan de reservas, no existe un plan de segmentación de los clientes, los activos no se utilizan por la fase uno, lo que hace que los activos vayan devaluándose, pasa el tiempo, etc. Entonces se trata de ayudas, pero no son ayudas estratégicas, no se encuentran alineadas con la situación actual de pandemia, y la visión es de “cuando pase esto se van a utilizar”, pero no existe una visión que nos diga “hagamos algo que nos permita aprender a vivir con la situación de pandemia, realicemos una estrategia con la pandemia”, creo que falta esa mirada y debemos convencernos que esto llegó para quedarse.
En cuanto al tema de los fondos de financiamiento ¿cómo ha sido la experiencia?
La experiencia ha sido mejor dentro de las instituciones públicas, en cuanto a percibir los fondos, tanto de Corfo como de Sercotec, en cuanto al desarrollo, el proceso de obtener estos recursos ha sido bastante complejo, dada la lentitud y la burocracia que tienen los agentes operadores y las mismas instituciones públicas todo ha sido bastante complejo. Aún nos encontramos esperando recibir unos fondos por completo, además de que estas organizaciones no se encuentran digitalizadas al 100% frente al tema de pandemia, te mandas cheques y uno no tiene la cuenta de empresa por las complicaciones del banco, etc. Entonces existen varios factores que ellos no han considerado, lo cual dificulta toda esta ayuda. Así que la experiencia no ha sido realmente la mejor, aunque se entiende que es todo un proceso que también están viviendo las instituciones públicas, que uno esperaría que fuese mucho más rápido y eficiente. Igualmente hemos sido actores activos en mesas publico/privadas planteando esta situación, haciéndoles ver que hay muchas brechas que hay que mejorar y esperamos que las resuelva. Pero dentro de todo se agradece el poder optar a estos fondos, dado que es muy importante que existan.
A cualquiera que desee o tenga la idea de emprender de una forma similar, ¿qué recomendaciones y lecciones les ha dejado todo este arduo camino?
¿Qué le diría a alguien que quiera emprender?... que se informe, lo primero; la información es vital, hacer “a lo tonto y a lo loco” da como resultado, como a nosotros en un comienzo, que gastamos recursos y energías en hacer algo y luego nos dimos cuenta de que estaba mal planteado, que no era lo que correspondía, porque no nos informamos, entonces, con calma acercarse a las instituciones referentes al turismo o a la iniciativa económica en la que se quiera emprender, acercarse también a los privados que llevan más tiempo, tratar de bajar alguna información de ellos, conocer su experiencia para poder, en cierta medida, ahorrarse las acciones que son innecesarias en un comienzo, esto ahorra tiempo y dinero. También trabajar con las instituciones públicas, se debe tener un trabajo integral y “darle”, informarse y emprender en el menor tiempo posible, con el menor costo posible, esa sería mi recomendación. Y estar constantemente participando, no llegar a pensar que llegó un momento en el cual “ya tengo todo”, hay que “tener hambre”, poseer ansias de mejorar y de crecer, creo que eso debería siempre tener un emprendedor, tener “ganas de más” y siempre estar emprendiendo.